Mi abuela Salud "la Avilesa", era devota de San
Roque. Además de lucir el nombre de nuestra patrona del pueblo, había nacido en el barrio
sanroqueño y en él se crió, casó y tuvo sus hijos hasta verlos mayores y
casados, en la calle de La Cruz.
Sólo salió del barrio cuando su ceguera y vejez le impidieron valerse
por sí misma, para ir a morar cerca de mis padres, siempre junto a su marido,
mi abuelo Juan. El santo francés al que rezaba, se la llevó el día de su
fiesta, un 16 de agosto de 1978, cuando mi abuela había cumplido los 86 años.
La ermita de San Roque data de finales del siglo XVIII. Su interior fue destruido totalmente en 1936,
incluidas imágenes como la de San Roque que existía entonces.
En su construcción primitiva no
se contempló la instalación de reloj y torre, algo posterior como se puede
observar en la secuencia de fotografías que ilustran la explicación.
En la primera podemos ver el edificio del Ayuntamiento en 1927, al que aún no se le había añadido ninguna torre. Se pueden ver a la derecha los raíles del tranvía que hacía el servicio hasta la capital.
En la primera podemos ver el edificio del Ayuntamiento en 1927, al que aún no se le había añadido ninguna torre. Se pueden ver a la derecha los raíles del tranvía que hacía el servicio hasta la capital.
En la segunda, de 1935, ya
podemos contemplar la torre que se le ha añadido al Ayuntamiento, con reloj y
campana superior. A la derecha, al fondo, se puede ver la ermita de San Roque
carente de torreta.
En 1953, en una revista de Semana
Santa, se pueden observar los progresos en la construcción del nuevo edificio
del Ayuntamiento, iniciado en 1945, aunque la torre está sin terminar.
La torre con reloj y campana desmontada del viejo Ayuntamiento, aún no se había instalado en San Roque, al menos en 1951, si hemos de
creer a J. Pacheco que ilustró con un dibujo alusivo a la romería del santo la portada del programa de fiestas de ese año, y al fondo esboza la torre clásica. Este dibujo serviría para ilustrar también
la portada del libro que escribió Adolfo Fernández, publicado en 2012, y que cedió a la
parroquia con el fin de recaudar fondos para la restauración que se estaba
llevando a cabo del templo.
En esta fotografía, realizada por
Pedro Cascales López en 1979, y publicada en su libro “Alcantarilla entre el
cielo y la tierra”, de donde la tomo prestada, podemos ver la ermita en obras.
De los años 70 es la estampa,
tamaño 15x20, que se reproduce.
De principio de los 80 es la
restauración del anterior retablo y de las pinturas del techo, a cargo del
pintor local Pascual Ayala, ya fallecido.
En mayo del año 2006 ya causaba
preocupación el deterioro del templo y se habían comenzado las profundas obras
de restauración. Una de ellas sería la supresión del copete metálico con
campana que durante medio siglo había campeado en lo alto de la torre del
templo.
Con la restauración del templo, y
la nueva torre, así lucía la calle San Roque en febrero del año 2010.
Y durante las fiestas de agosto
del año 2011.
Se construyó un nuevo retablo
para el Altar Mayor del templo.
Y lo más importante. Para poder
celebrar su fiesta anual, se ha vuelto a constituir la hermandad de San Roque,
que cada año se esmera por ofrecer entretenimiento a los vecinos que quedan en
el barrio aguantando los calores estivales, con juegos infantiles, paella,
chocolatada, fiesta de la espuma, noche flamenca, bingo, y todo lo que se les
ocurre. Y además se pasea al santo en romería en su día por todo el barrio,
acompañado de banda de música y cohetería. Con ello se intenta revitalizar estas fiestas que son las mas antiguas y populares que en su día tuvo nuestro municipio.
Una imagen de San Roque a su recogida del año 2014.
Una imagen de San Roque a su recogida del año 2014.
Este es el programa de fiestas
para el presente año 2015.
Ahora quiero dejar constancia de
la falsedad de un mito sobre la iglesia de San Roque y la catedral de Murcia,
acerca de que “los escalones de entrada a San Roque están a la misma altura que
la veleta de la torre de la catedral de Murcia”. Nada más lejos de la realidad.
Pedro L. Cascales López,
Arquitecto Técnico, Jefe que fue de la Oficina Técnica de Urbanismo del
Ayuntamiento de Alcantarilla, escritor de varios libros sobre nuestro pueblo,
entre ellos “Alcantarilla entre el cielo y la tierra”, que ya he citado, y
“Topografía y evolución urbana de Alcantarilla”, en este último, en su
página 40 escribe lo siguiente:
Para los que estén interesados en
seguir más extensamente la obra citada, pueden encontrarla en esta dirección:
A todos los sanroqueros, felices
fiestas y ¡A divertirse!
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