El Guerrero del Antifaz

10 de septiembre de 2015

“El Guerrero del Antifaz” es el tebeo de aventuras decano en nuestro país. La colección empezó su primera edición en el año 1944, publicada por la Editorial Valenciana, y tendría una larga vida hasta el número 668 en su formato apaisado, en el año 1966. El guión fue de Manuel Gago García, apoyado en algunas ocasiones por su hermano Pablo Gago y por Pedro Quesada; el dibujo también fue obra de Manuel, excepto en los números 421 a 500 que lo realizó Matías Alonso, volviendo nuevamente Manuel Gago a hacerse cargo del dibujo hasta el final de la colección.  

El autor declaró en más de una ocasión que se había inspirado en la novela de Rafael Pérez y Pérez “Los cien caballeros de Isabel la Católica”. Publicado por primera vez en 1934 por Editorial Juventud de Barcelona, el libro tiene 176 páginas, existiendo desde entonces varias ediciones distintas, hasta la de 1977 de la misma editorial.  

Antes había dibujado un cuaderno de aventura completa titulado “El juramento sagrado” que, como veremos, es el predecesor del Guerrero del Antifaz. Viendo “El juramento”, nos daremos cuenta exacta del estilo que ya apuntaba Manuel Gago con 17 años, y que será el mismo de los primeros cuadernos del Guerrero, que le servirán para ir afianzándose y soltándose poco a poco.  

Manuel Gago desarrolló la historia en el reino de Granada y en las contiendas propias de árabes y cristianos en tiempos de los Reyes Católicos. 

Ya hemos podido ver una muestra de su incipiente labor con la plumilla. En ese primer cuaderno, incluso se atrevió a representar la rendición de Boabdil el chico, y la entrega de las llaves de Granada a los Reyes Católicos en 1492. El cuaderno estaba compuesto de 16 páginas y se editó en 1943. 

Las aventuras del Guerrero del Antifaz comienzan en la época de los Reyes Católicos y durante la lucha por la reconquista por el reino de Granada. La esposa del Conde de Roca es raptada por los sarracenos mandados por Alí Kan. Éste la lleva a su harén tomándola como su esposa, sin saber que estaba embarazada, y a los ocho meses, cuando da a luz un hijo, el árabe cree que es suyo, y lo educa en los valores del Islam, convirtiéndolo en enemigo de los suyos. 

Cuando es mayor, su madre le cuenta la verdad, siendo observados por Alí Kan que, al enterarse de que no es hijo suyo, mata a la madre y se enfrenta a él, siendo vencido por el Guerrero que lo da por muerto. Decide en ese momento ponerse del lado de los cristianos, pero como ha luchado junto a los musulmanes, para que no lo puedan reconocer en ningún bando decide enmascararse, naciendo a partir de ese momento el Guerrero del Antifaz. 

Pronto tendrá como compañero a Fernando, adolescente huérfano. Serán sus amores la condesa Ana María y Sarita, aunque el Guerrero también tendrá como buenas amigas a las bellas musulmanas Aixa y Zoraida.  

Continuamente van apareciendo personajes, tanto amigos como enemigos, que van dando acción y aventuras. El Conde de los Picos es un aliado del Guerrero que también se enamora de Ana María. Además de Alí Kan, también tendrá como enemigos a Yarmuk, a Harúm, a la Mujer Pirata, que tendrá un romance con el Guerrero, el Pirata Negro y su novia Beatriz, y muchos otros más.

Siguen sucediéndose aventuras, dentro y fuera de España, en tierras africanas, vuelve a enfrentarse en múltiples ocasiones a Alí Kan. Ha conseguido acabar con algunos de sus más feroces enemigos; ha rescatado a Ana María todas las veces que la habían raptado. Pero piensa que debe darse a conocer, y en el cuaderno 127 reúne a la mayoría de los caballeros cristianos para contarles la verdad y quitarse el antifaz. Pero uno de sus enemigos, el Capitán Rodolfo, al que mató a un hermano cuando se creía sarraceno, ha invitado también a todos los que habían perdido a algún familiar a manos de él cuando era el supuesto hijo de Alí Kan.  

A pesar del apoyo del Conde de Torres y del Conde de los Picos, que son los únicos que creen en él, los demás caballeros están en contra, ya que se presenta Alí Kan para testificar e insiste en que el Guerrero del Antifaz es hijo suyo. Los cristianos creen a Alí Kan. 

En el número 82 tiene el primer encuentro con la Mujer Pirata. Este personaje femenino al principio es enemiga del Guerrero, y en el transcurso de la serie va enamorándose de él. 

Manuel Gago acaba con ella bruscamente, rompiendo el corazón del Guerrero y de algún lector también, en el número 186. 

En el año 1958, cuando la colección alcanza su número 362, llega el momento de terminar una primera parte en las aventuras del Guerrero. El cuaderno se titula "Retorno Feliz", y en él se rehabilita al Guerrero del Antifaz, siendo perdonado por los Reyes Católicos, además de terminar en boda con su amada Ana María, siendo ya el Conde de Moncada (sin bautizar y sin cursillos, que siempre ha habido clases). A pesar de eso tenía nombre cristiano: Adolfo. ¡Ah, y tengo la boda en color! 

Como bien sabemos, aunque aparece la palabra FIN al final de ese cuaderno, las aventuras no terminan, y el número 363 ya lleva como título “Nuevas aventuras”. En esta segunda parte veríamos aparecer al hijo del Guerrero, y los escenarios de las aventuras serían dispersos y exóticos, viajando por otros continentes, no ciñéndose exclusivamente al destino de caballero cristiano luchando contra la morisma que al inicio de la colección le conocimos. 

Continuó Gago dibujando al Guerrero por esos mundos de Dios hasta 1966, en el cuaderno 668, y cuando estaba dibujando éste, algún motivo desconocido para el público le obligó a tomar la decisión repentina de acabar la obra en las dos últimas páginas del mismo. La portada de ese epílogo nada presagiaba. En la última viñeta original, al pie de la misma había rotulado Manuel Gago la frase “Fin de la colección”, pero en esta última página que yo traigo aquí, de la posterior re-edición en color, la editorial con buen criterio financiero rotuló “continuará”, al tener prevista muy posiblemente la re-edición de las Nuevas Aventuras que Manuel Gago realizó en 1979. 

Además de los números semanales de la colección, al llegar la época estival y la Navidad, se editaban sendos álbumes con aventuras extraordinarias, incorporando pasatiempos y otros autores. 

Tengo constancia de que se editaron algunos álbumes de cromos del Guerrero. A mí sólo me llegó el del año 1979, de 192 cromos a color, dibujado por Gago, con el inicio clásico de la historia, pero con distintas aventuras y sin culminar en boda feliz, posiblemente dejando abierta la puerta a una segunda parte. 

Durante el tiempo que duró la colección de cuadernos apaisados, la censura obligaba a presentar los dibujos y el texto para su aprobación. Y se editaron tal cual. Pues a pesar de haber pasado esa censura previa, cuando la editorial realizó una re-edición para coleccionistas en los años setenta, en formato vertical y a color, nuevamente debieron pasar censura que les obligó a realizar modificaciones con respecto a la edición original. Pongo algunas guindas de muestra. 

Esos “salvajes corsarios tunecinos” de la primera edición en blanco y negro, fueron después en color solamente “corsarios”. He cambiado el orden de edición para poner juntas las viñetas a comparar. 

En 1973 se editaron 30 cuadernillos verticales, con aventuras completas de nueve o diez páginas, siempre dibujadas por Manuel Gago. Esos cuadernillos dieron cabida además a series como Star Papagayo, también de Manuel Gago; King Force, de José Grau, y Dick Turpín (homenaje a Ramón de la Fuente). 

Esas "Nuevas aventuras" a las que me refería cuando hablaba del último cuaderno de la colección apaisada, ya fueron dibujadas por Manuel Gago y compuestas expresamente para ser editadas en formato vertical. Se lanzaron 110 cuadernos semanales entre el 6 de enero de 1979 y el 7 de febrero de 1981, quedando inconclusa la colección por la brusca muerte del autor. En la imagen, la portada del primer número y la última página del mismo cuaderno. 

Iniciado el siglo XXI me llegaron noticias de que un hijo de Manuel Gago había acometido la empresa de dibujar una aventura que culminase la que su padre había dejado inconclusa, y diera fin a las andanzas del Guerrero del Antifaz. Sólo he llegado a ver la portada del último cuaderno. 

En 1997, la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre le dedicó un sello de correos. 

El Guerrero no quería marcharse sin despedirse de otro paladín español. Juntos han surcado los kioscos arrostrando tempestades y malos vientos hasta que chocaron con la tele. ¡Voto a bríos! ¡Sus y a ellos! ¡Santiago y cierra España! Pero a última hora, hasta el Jabato ha querido salir en la foto. De alguna manera, son sus invitados en el blog, ¡qué caramba! 

Esta página está dedicada a mi buen amigo Pepe Riquelme.